Para este nuevo año 2013 deseo y aspiro…
Aspiro… a tener salud, a que no me duela la espalda y a no caer en la cama con fiebre y antibiótico cada vez que hago un descanso del trabajo. Y que esto signifique tristemente no haber podido tener un detalle, un regalo, para los míos en momento de la celebración.
Aspiro… a los que me rodean aun que estén lejos y a los que quiero, incluidos hijos y familias, tengan salud y no les falte de nada.
Aspiro y espero… que este 21/12/12 sí haya significado un fin de una etapa, un cambio a un mundo más justo.
Aspiro… a seguir construiendo este hogar tan bonito que hemos creado. A que nuestros sentimientos sean iguales o mayores. A poder celebrar a nuestra manera nuestro compromiso. A poder seguir disfrutando de unas buenas vacaciones… a poder seguir haciendo escapadas al Emporda, Costa Brava, Camprodón, o alguna ciudad interesante.
Aspiro… a que me siga gustando y motivando mi trabajo al que dedico día a día y seguir estando a gusto y alineada con las personas con las que lo comparto.
Aspiro… a seguir aprendiendo.
Aspiro… a seguir creyendo en mi instinto y porque no que crean en él.
Aspiro… a dormir más.
Aspiro… a seguir teniendo ideas.
Aspiro… a que se me sigan «escapando» pocas cosas.
Aspiro… a que se me siga poniendo la piel de gallina.
Aspiro… a mi manera, seguir teniendo las cosas claras. Aun que no guste, sin perder flexibilidad y maneras.
Aspiro… a más perfección laboral. Sabiendo mis carencias.
Y si todo ello atrae más buenas consecuencias… mejor, que mejor! Pero ante todo estas son mis aspiraciones, …¿poco ambiciosas? ¿será la fiebre?;-) la vida me sonríe y recuerdo una frase… “No es rico el que más tiene sino el que menos necesita”. San Agustín, filósofo católico.